El reciente anuncio de la presidenta Claudia Sheinbaum sobre la implementación de un arancel del 35% a los textiles confeccionados, como la ropa importada de Temu y Shein, ha causado gran indignación entre las «NENIS» (mujeres emprendedoras que venden productos en línea). Esta medida, que entró en vigor el 1 de enero de 2025, ha generado malestar entre quienes utilizaban estos productos, que antes podían adquirir a precios extremadamente bajos, para generar ingresos para sus hogares. Ahora, con el nuevo impuesto, los productos importados entran en competencia directa con los productos nacionales, lo que aumenta los precios y afecta la rentabilidad de estas pequeñas vendedoras.
El anuncio ha generado un alboroto en redes sociales, donde las «NENIS» se han manifestado en contra, argumentando que el aumento de precios afectará su fuente de ingresos. Con la nueva medida, los precios de los productos importados que antes eran muy baratos serán mucho menos competitivos frente a los productos textiles locales. El gobierno federal, por su parte, ha defendido la medida como una estrategia para fortalecer la industria textil mexicana y reducir la dependencia de productos chinos.
