Este lunes 27 de enero, las megacalderas que permanecieron en Querétaro por más de tres meses continuaron su trayecto hacia su destino final: la refinería de PEMEX en Hidalgo. Estos enormes equipos industriales, clave para el funcionamiento de la refinería, generaron expectación debido a su tamaño y complejidad para su transporte.
Durante su estancia, las megacalderas fueron resguardadas y planificadas estratégicamente para garantizar un traslado seguro. Su paso por Querétaro formó parte de un operativo logístico coordinado que incluyó cierre de vialidades y ajustes en horarios de transporte, evitando contratiempos en su movilización hacia el estado vecino. La salida de las megacalderas representa un avance significativo en los trabajos de infraestructura energética de la región.