El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) anunció la rescisión del contrato con la empresa de seguridad privada que brindaba servicio en el Hospital General de Zona No. 1, ubicado en Villa de Álvarez, Colima, luego de que se viralizara en redes sociales un video que muestra a varios guardias golpeando brutalmente a un paciente.
En el material audiovisual se observa cómo al menos cuatro elementos de seguridad privada agreden físicamente a un derechohabiente que, momentos antes, había exigido la entrega de un medicamento en el área de farmacia. La violencia cesó únicamente cuando un médico intervino para auxiliar al paciente, quien fue trasladado en silla de ruedas al área de urgencias para recibir atención médica inmediata.
En respuesta al hecho, el IMSS emitió un comunicado en el que condenó enérgicamente la agresión y aseguró que no mantendrá relaciones con proveedores que incumplan los protocolos de derechos humanos.
“El IMSS no mantendrá relación con proveedores que incumplan los protocolos de derechos humanos o que no capaciten adecuadamente a su personal para brindar un trato digno a los derechohabientes”, subrayó el instituto.
Respecto al origen del conflicto, el IMSS Colima informó que el paciente solicitaba nuevamente un medicamento que, de acuerdo con los registros institucionales, ya le había sido entregado el pasado 2 de junio en su Unidad de Medicina Familiar. Además, se explicó que el fármaco solicitado corresponde a uno de transcripción médica y no forma parte del cuadro básico, por lo que su entrega no puede repetirse dentro del mismo mes, conforme a la normativa vigente.
El caso ha generado una fuerte reacción en redes sociales y ha reabierto el debate sobre el trato que reciben los derechohabientes en las unidades médicas, así como la necesidad de supervisar con mayor rigor los servicios subrogados dentro del sistema de salud pública.
